COMPARTIR
Tema muy de moda últimamente, sin embargo, las organizaciones se empeñan en hablar y hablar pero nada dicen del “cómo” hacen para atraer talento y es que en España tenemos un problema. Un 70% de las empresas en España son Pymes y sus dueños, que en muchas ocasiones son además los directores de rrhh, financieros o de marketing, no tienen ni recursos ni formación para llevar a cabo esta tarea tan importante que es la de atraer el mejor talento. Y ya no solo hablamos de atraer sino de mantener ese talento y de en definitiva, enamorar a tus empleados.
Solo unas pocas gozan del tamaño y los recursos para tener el prestigio de atraer el talento. He de reconocer que unas pocas y gracias a personas que trabajan en ello, promueven el orgullo de pertenencia y generan esa cultura de atraer el talento. En algunas incluso empoderan a las personas para que ellos mismos diseñen su propia formación y así puedan elegir su trayectoria y desarrollo profesional, pero ¿cómo pueden hacerlo las pequeñas?.
Muchas ahora, no sé si por la moda o por qué, publican unos valores maravillosos con los que dicen se identifican pero ¿realmente se viven día a día? o ¿el trabajo operativo les come y nadie dedica ni un momento a contemplar su estado actual y donde quieren ir?. Y ¿la comunicación?, ¿es realmente fluida?.
Hoy he tenido la suerte de compartir mesa y tertulia con Foro de Recursos Humanos en la Cámara de Comercio de Alemania junto a directivas de las empresas como Reparalia, Afianza, Speexx y Zeiss.
Entre los comentarios más importantes podría destacar que hay que buscar las competencias y la actitud en la atracción de talento y no tanto en las habilidades técnicas o que se venga o no del mismo sector. Hay que enamorar a las personas y como dice Richard Brandson:
“Entrena a la gente lo suficientemente bien como para que se puedan ir, trátalas lo suficientemente bien como para que se quieran quedar”.
También se ha resaltado la comunicación. Tanto externa como interna, es decir, el marketing y los rrhh deben ir de la mano y los rrhh deben estar involucrados en el negocio más que en los asuntos administrativos. E internamente promover los valores y vivirlos en el día a día.
Pero y las Pymes, ¿cómo pueden hacerlo?, tal vez la única forma sea a través de la formación de sus CEOs. Para ello surgen empresas como Afincoach que ofrecen a organizaciones de cualquier tamaño la posibilidad de formarse en habilidades y competencias diseñadas exclusivamente para ellas.
En primer lugar y tras un análisis de la situación, se estudia qué competencias están necesitando y después se diseña la intervención. Generalmente se eligen dos o tres competencias como comunicación, escucha activa, feedback, resiliencia, compromiso, gestión del cambio, etc, y tras una explicación conceptual se trabaja a través del “learning by doing” que es la mejor manera de interiorizar y hacer hábito el concepto. Con herramientas de coaching, acaban todos desarrollando los talentos que tenían ya latentes y que por cualquier motivo no habían puesto en valor todavía.
La clave del éxito es cambiar el lenguaje, en primer lugar el CEO y de ahí hacia abajo y horizontalmente.
Se nota el cambio y el éxito cuando cambia el lenguaje.